📖 Leo reseñó Dune de Frank Herbert (Dune, #1)
Ciencia ficción de altísima calidad filosófica
5 estrellas
¡Ah qué agradable es volver a leer con expectativas moderadas que terminan siendo ampliamente rebasadas! Iniciaré con una descripción muy sintetizada: Dune dice grandes verdades sobre la condición humana y las civilizaciones que resultan de ella, recurriendo a una ficción que se siente como exquisito relato histórico. Es un libro que atrapa, de esos que te obligan a buscar momentos, por pequeños que sean, para saber qué más ocurrirá en la trama. Frank Herbert despliega un estilo narrativo con altísima precisión para conseguir que las descripciones a detalle de ambientes, objetos, personas y personalidades, no interfieran con el flujo de la historia, sino que lo nutran y lo hagan disfrutable. Pocos libros me han hecho sentir tan adentrado en sus ambientes. Frank eligió muy bien las dos características esenciales de Arrakis: carencia extrema de agua y presencia en abundancia de un recurso menos útil para sobrevivir, pero que despierta mayor …
¡Ah qué agradable es volver a leer con expectativas moderadas que terminan siendo ampliamente rebasadas! Iniciaré con una descripción muy sintetizada: Dune dice grandes verdades sobre la condición humana y las civilizaciones que resultan de ella, recurriendo a una ficción que se siente como exquisito relato histórico. Es un libro que atrapa, de esos que te obligan a buscar momentos, por pequeños que sean, para saber qué más ocurrirá en la trama. Frank Herbert despliega un estilo narrativo con altísima precisión para conseguir que las descripciones a detalle de ambientes, objetos, personas y personalidades, no interfieran con el flujo de la historia, sino que lo nutran y lo hagan disfrutable. Pocos libros me han hecho sentir tan adentrado en sus ambientes. Frank eligió muy bien las dos características esenciales de Arrakis: carencia extrema de agua y presencia en abundancia de un recurso menos útil para sobrevivir, pero que despierta mayor ambición. Esa combinación es uno de los ganchos que jalan al lector a las profundidades del planeta en el que ocurren los sucesos de esta narración. Pero lo que me pareció más asombroso de Dune, es la maestría con la que el escritor construye los lenguajes, los utensilios, las tradiciones, las costumbres y los ritos que proyectan la obra como un genuino libro de geografía política, haciendo que el lector se sienta como un historiador leyendo la "Brevísima relación de la destrucción de las Indias" de Bartolomé de las Casas (1552). He tenido la fortuna de leer "El Príncipe" de Maquiavelo, "El arte de la guerra" de Sun Tzu, una fracción mayoritaria del Antiguo y del Nuevo Testamento en la "Biblia Católica", muchísimas citas del "Corán", otras tantas del "Canon Pali", varias de las obras de Issac Asimov... Y no estoy seguro si esas lecturas me prepararon para disfrutar mejor Dune, o si es que Dune las supo sintetizar todas de una forma tan exquisita que me ha hecho revalorarlas. Sí, recomiendo leer Dune.